¿Qué tipos o modalidades de autoconsumo existen?

Conocer los diferentes tipos o modalidades de autoconsumo te va a permitir detectar cuál puede convenirte.

Además, va a ayudarte a constatar la importancia del autoconsumo en las sociedades actuales para fomentar la transición energética hacia modelos de consumo de energía más respetuosos con el medioambiente y más accesibles, ya que utilizan recursos locales.

Autoconsumo individual o colectivo, con o sin excedentes, aislado o conectado a la red eléctrica, con o sin compensación… Las posibilidades pueden ser abrumadoras. Por esta razón, queremos arrojar algo de luz en esta cuestión con este artículo que aborda las modalidades de autoconsumo más significativas.

Tipos de autoconsumo según las personas que lo utilizan

Tipos o modalidades de autoconsumo

El autoconsumo se puede clasificar según quien lo produce y consume.

Autoconsumo individual

El autoconsumo individual se refiere a la energía que es generada y consumida por un único usuario, ya sea una vivienda, empresa o industria.

Se trata del modelo más común en viviendas unifamiliares y pequeños negocios o empresas, y permite a quien lo instala producir energía limpia para cubrir una parte o la totalidad de su demanda energética, según la potencia que ofrezca la instalación.

Autoconsumo colectivo

En el autoconsumo colectivo varios consumidores comparten una misma instalación de generación de energía.

Puede ser un autoconsumo compartido en una comunidad de vecinos, varias empresas de un parque o polígono industrial, o lo que se conoce como comunidades energéticas.  

Esta modalidad de autoconsumo permite reducir los costes de instalación y mantenimiento, favorecer el acceso a una energía renovable y optimizar el uso de la energía generada, minimizando las pérdidas.

Autoconsumo industrial

El autoconsumo industrial cumple con varios objetivos: que las empresas e industrias generen su propia energía, ahorren costes y se aseguren la estabilidad energética, mientras protegen el medioambiente.

Las instalaciones de autoconsumo brindan, en todas estas modalidades, una gran ventaja: revalorizan los espacios en los que se instalan.

Modalidades de autoconsumo según la conexión a la red

En función de la conexión a la red eléctrica, el autoconsumo puede ser aislado, o gestionar excedentes. Lo vemos. 

Autoconsumo aislado

El autoconsumo aislado es aquel que no está conectado a la red eléctrica, es decir, el suministro de energía depende exclusivamente de la que se genera, que se puede almacenar en baterías o utilizar directamente.

Suele ser una solución interesante para viviendas apartadas donde no llega el suministro eléctrico. Una instalación fotovoltaica puede ser, por ejemplo, una alternativa a un generador de gasoil más limpia, segura y accesible.

Autoconsumo sin excedentes

El autoconsumo sin excedentes es un sistema conectado a la red eléctrica que consume toda la energía que genera o la acumula en baterías para consumirla en otro momento (por ejemplo, por la noche o cuando no se pueda producir energía).

En el momento en que no queda más energía, los usuarios recurren a la red eléctrica.

Puede servir, además, de respaldo si hay cortes de luz, y para abaratar la factura.

Autoconsumo con excedentes

En el caso del autoconsumo con excedentes, como su nombre indica, gestiona la energía sobrante que no se ha consumido vertiéndola a la red de dos maneras:

  • Excedentes con compensación simplificada. El importe de la energía vendida se descuenta a modo de bonificación en la factura eléctrica.
  • Excedentes sin compensación. El importe se vende en el mercado energético. En este caso, puede serte de utilidad estar al día en cuanto al precio del excendente por autoconsumo en el mercado regulado.

Tipos de autoconsumo especiales

Mención aparte merecen dos modalidades de autoconsumo especiales que te describimos seguidamente.

Comunidades solares o comunidades energéticas

Las comunidades solares son proyectos de autoconsumo colectivo que pueden estar ubicadas en múltiples emplazamientos, tanto urbanos como rurales, como tejados de edificios, terrenos cercanos a los consumidores, áreas comerciales, etc.

Se trata de proyectos que promueven la gobernanza de la energía entre los miembros de una comunidad o asociación de todo tipo de perfiles, reduciendo el coste del suministro y la dependencia energética.

Huertos, granjas y campos solares

Los huertos solares o granjas solares (campos solares cuando son de gran envergadura) son instalaciones fotovoltaicas que producen electricidad en terrenos amplios y soleados no rentabilizados.

Pueden destinarse al autoconsumo industrial o a abastecer comunidades energéticas, por poner dos ejemplos.

¿Qué son las modalidades de autoconsumo 41, 42 y 43?

Para clasificar los diferentes tipos de autoconsumo, la Red Eléctrica utiliza una serie de códigos que hacen referencia a sus características técnicas y administrativas.

Tomando el ejemplo de las modalidades 41, 42 y 43 significan lo siguiente:

  • 41. Instalación de autoconsumo individual con excedentes acogidos a la compensación simplificada.
  • 42. Instalación de autoconsumo colectivo con excedentes y compensación en red interior.
  • 43. Instalación de autoconsumo colectivo con excedentes y compensación a través de la red de distribución.

Tipos de autoconsumo según la fuente de energía

Otra manera de clasificar el autoconsumo puede articularse según la fuente de energía.

En ese sentido, las principales fuentes son:

  • Energía solar que puede ser fotovoltaica (produce electricidad) o térmica (genera calor).
  • Energía minieólica que se sirve del viento para producir electricidad gracias a pequeños generadores adaptados al uso doméstico.
  • Aerotermia, una tecnología que utiliza la temperatura del aire.
  • Geotermia que se sirve del calor de la tierra.

Las tecnologías enfocadas en las energías renovables son cada vez más innovadoras y facilitan la instalación de sistemas híbridos que mejoran las ventajas del autoconsumo, y maximizan el ahorro energético y el aprovechamiento de los recursos naturales. 

Publicado el
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